El cantante Américo sufrió una violenta encerrona la madrugada de este jueves en La Florida, contando detalles de los minutos de terror que vivió junto a su familia.

Esta mañana, el intérprete conversó con el matinal de Chilevisión, revelando que cuatro delincuentes los abordaron con armas de fuego para robarle la camioneta y especies.

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«Estamos digiriendo todo esto. La familia está bien, los niños fue lo que más nos preocupó, sin duda que es lo único importante… El tema es la familia, íbamos con los dos menores de edad, (tuvimos) una gran fortuna… habernos puesto a disposición de solo pedir que nos entregaran a los niños», comentó al respecto.

Además añadió que «yo ni siquiera he podido desahogarme de anoche, he dormido poco. Mi señora se bajó de la camioneta y nos abordaron. Hoy día nadie está ajeno, como está la situación, es una verdadera ruleta rusa de que te pueda pasar».

«Se trata de lo mismo, gente armada, violenta, que no le importa nada, no siente nada», complementó visiblemente afectado.

Contexto en que Américo contó que le pidió a los antisociales que «por favor me dejaran sacar a los niños. Mi hija que tiene 12 años fue muy valiente, se bajó rápidamente y se devolvió, asustada por su hermanito que estaba atrás, pero fue muy shockeante».

«Los niños están descansando, hay que estar atentos para ver cómo contenerlos y acompañarlos. Esto no es ligero, gracias a Dios lo estamos contando», detalló.

Además, Américo expresó su preocupación ante esta situación ya que «existía la posibilidad de que se fueran (con mis niños atrás). Te revuelve el estómago, te revuelve la vida, todo lo que trae esto».

Finalmente, el intérprete nacional lanzó un análisis sobre la delincuencia: «no se trata de empatar, de quién lo ha hecho mejor o peor».

«Hoy día la gente responsable tiene una gran oportunidad de hacer algo distinto, es lo que todos esperamos. A quienes nos dirigen, les deseo lo mejor, que lo hagan lo mejor posible», indicó.

Para cerrar entregando crudos detalles de cómo esto afectó a su hija: «más allá de lo que podamos haber hablado, se escapa de la realidad cuando te toca vivirlo. Se te revuelve el estómago, y eso verlo reflejado en tus hijos… Mi chiquita anoche llegaba a vomitar del susto en la comisaria».